Nuestros perfiles profesionales II: Auditor de Cuentas

Una persona formada en Auditoria tiene un abanico muy amplio de salidas profesionales tanto en el ámbito privado como en el público.

En el primero de ellos, el privado, podemos decir que el más importante es la actuación profesional como auditor ejerciente. Dentro de ella se realizan dos actuaciones diferenciadas. Comenzará como auditor que ejerce como tal dentro de una firma y pasados 3 años aproximadamente el ejercicio de la profesión en nombre propio, para ello es necesario tener superados todos los requisitos de acceso al Registro Oficial de Auditores de Cuentas (ROAC). Esta labor se puede realizar tanto en el seno de una firma de auditoria siendo socio o gerente o mediante el ejercicio como auditor individual.

Como profesional está capacitado además para trabajos de muy diversa índole. Enumeramos algunos de ellos:

• La administración concursal.
• Elaboración de Informes diferentes al de Auditoria Financiera, tales como: Informes de Gobierno Corporativo, Informes requeridos por el registro Mercantil.
• Otros trabajos tales como: planes de viabilidad, informes de sostenibilidad, planes de prevención de riesgo penal o consultoría de sistemas de información.

También puede formar parte del Departamento de Auditoría Interna de una empresa ya que la Auditoría interna y externa comparten actualmente en gran medida su forma de trabajar.

Asimismo, en cualquier caso, la formación en Auditoría permite a la persona que la posee pertenecer a un Departamento de Contabilidad de cualquier empresa y, en especial, si esa empresa es auditada con objeto de servir de conexión con el auditor externo.

En el ámbito público pueden optar a plazas dentro de la Cámara de Cuentas de Andalucía o de otras comunidades autónomas o del Tribunal de Cuentas del Reino. Asimismo, existe la posibilidad de pertenecer a algún organismo de Intervención tanto a nivel estatal como autonómico o local.